domingo, 30 de junio de 2019

A UN AÑO DEL TRIUNFO ESPERANZADOR 


POR: GUILLERMO OROZCO R.



La aplastante e histórica victoria electoral de AMLO representó un triunfo esperanzador para el pueblo de México. Las expectativas de cambio se expresaron a través  de una oleada de luchas y demandas reivindicativas: primero los pobres, echar abajo la mal llamada reforma educativa, el hartazgo de la población ante el saqueo y corrupción de los gobiernos neoliberales, hicieron más fácil el triunfo de AMLO.
Pero no basta con triunfar, hace falta también la consolidación del proyecto de gobierno y una estructura que le permita gobernar y soportar los embates de quienes heridos por la pérdida del poder que ejercieron, se encargarán de poner una serie de obstáculos para que a su gobierno le vaya mal.
No debemos de emocionarnos de que el triunfo de este movimiento  esperanzador es ya la puesta en marcha de un régimen socialista en el que los trabajadores tomen el poder, esto es apenas un paso para que a futuro se termine con la corrupción y se sienten las bases para que la situación de desigualdad mejore,  una especie de nacionalismo revolucionario que ante lo que representó  el gobierno neoliberal significa un pequeño avance.
Millones de personas ven  al gobierno de AMLO como un gobierno propio. Pero en realidad López Obrador  aglutina intereses irreconciliables, Morena es una especie de “Frente Popular” donde se combina el deseo de cambio de las masas, pero al que llegaron todo un ejército de arribistas y “asesores” de los intereses empresariales montados por arriba, tratando de moderar y frenar el proceso de cambio o se mudaron de barco. En realidad AMLO llega al gobierno con un programa reformista bastante tímido y recibiendo numerosos grupos de  políticos salidos del PRI, PAN y PRD, donde anida el huevo de la serpiente. Incluso en Morena, que debe ser el partido fuerte del presidente  no hay un esfuerzo unitario para que funcione como el organismo superior de lucha que fortalezca a AMLO y a su IV transformación, incluso los elementos más débiles,  atacados y aislados en el nuevo partido son los viejos luchadores sociales con olor a izquierda.
Los dirigentes y muchos militantes de morena no tienen pasado histórico, para ellos la lucha política empezó apenas en 2014, el pasado lejano de la izquierda que se forjó en la trinchera de la lucha social, para ellos  no existe.
A un año del triunfo avasallador de AMLO,  la popularidad del presidente sigue con un porcentaje de aceptación enorme que sobrepasa el 75%, pero su partido, sus diputados, sus senadores y los funcionarios del gabinete han tenido un largo proceso de aprendizaje que no termina y que de repente lo debilitan,  provocan con ello que López Obrador tenga  que sortear todo tipo de tempestades de manera unilateral.
Tenemos que ser más audaces para que las mentiras repetidas por los adversarios de AMLO en contubernio con los medios chayoteros al estilo Goebbelsiano,  de repetirlas  cientos y cientos de veces para que acaben por tomarse como verdad no tengan éxito. Que la gente conozca que el gobierno de AMLO ya retiró las pensiones de los expresidentes, que bajó los sueldos de altos funcionarios, que ya puso en venta al avión presidencial, que aumentó al doble las pensiones de los adultos mayores, que ya echó a andar el proyecto del Tren Maya, que casi se extermina el huachicoleo con las gasolinas, que eliminó el aeropuerto de Texcoco en el que había negocios millonarios, que echó abajo la mal llamada reforma educativa, que puso en su lugar a antorcha campesina, que convirtió a los pinos en un museo con acceso libre al público y que tiene una imagen de gran aceptación en la comunidad internacional. Todo eso y más en menos de seis meses.
El triunfo de AMLO es una de las coyunturas más importantes de los tiempos modernos. A pesar de que tengamos que discutir y reflexionar sobre lo que se tiene que enmendar en  el nuevo gobierno, todos debemos estar dispuestos a apoyar la IV Transformación y estar a la altura de esta gran oportunidad histórica.
Por eso se tiene que reiterar  que ese triunfo electoral  de 2018,  fue  un triunfo del pueblo de México y que conmemorarlo a un año sirve para tomar nuevos bríos para enfrentar a esa oposición que sigue necia en no  asimilar su derrota.  
Guillermo Orozco Rodríguez.- 1º de Julio de 2019

domingo, 23 de junio de 2019

La Escuela Primaria “Despertar Lagunero” 

logra su generación número 62 

POR: GUILLERMO OROZCO R.


La Reforma Agraria cardenista caminó a la par de una efectiva y urgente revolución educativa,  las precarias escuelas elementales que a regañadientes de la mayoría de los hacendados funcionaron en contados ranchos y haciendas, deberían a partir de 1936 de funcionar por mandato de gobierno, en todos los nuevos ejidos y centros de población, pero ya convertidas en Escuelas Rurales Federales.
Durante su mes de estancia en la comarca  lagunera, el día 4 de Diciembre de 1936 el general Lázaro Cárdenas pone en funcionamiento la Dirección  federal de educación en la comarca Lagunera, cuyo primer titular fue el General y Profesor José Reyes Pimentel.
Cada escuela rural era parte de esa ideología nacionalista del cardenismo y se notaba desde los  nombres asignados a los planteles educativos: “Liberación Social”, “Redención Agraria”, “Revolución Social”, “Emancipación Proletaria”, “Progreso Proletario”, “Plan Sexenal”, “Ricardo Flores Magón”, “Emiliano Zapata”, “Francisco J. Mújica” y “Lázaro Cárdenas”, entre otros.
Una obra que difundió la política agraria, social y educativa del gobierno cardenista en la Región Lagunera es el libro denominado “El Despertar Lagunero”,  un trabajo de recopilación de datos y hechos, que reunió un vasto material escrito y fotográfico de cómo funcionaron los nacientes  ejidos en la región, con una escuela en cada lugar como centro vital de la misma. Su tiraje fue de tan sólo mil ejemplares, por lo que si alguien conserva alguno de ellos (como es mi caso) debe considerarlo como una joya. Consta de 287 páginas, su impresión se hizo en los Talleres Gráficos de la Nación con fecha  13 de Septiembre de 1937,  siendo  responsable del mismo el Profesor José Reyes Pimentel.   
José Reyes Pimentel profesó un cariño muy especial a la Escuela Rural Federal del Ejido San Antonio de los Bravos; en el Municipio de Torreón,  a la que le asignó el mismo nombre que a su libro,  precisamente  “Despertar Lagunero”
El pequeño edificio de la Escuela primaria Rural Federal “Despertar Lagunero” se concluyó con faenas o jornadas de trabajo y cooperaciones económicas el año de 1937, constaba tan solo de dos aulas y un recibidor central que funcionaba como dirección del plantel. Una de las aulas albergaba los grupos de primero y segundo grados y la otra tercero y cuarto grados, atendidos por un solo maestro, funcionando así hasta el año de 1958 en que se logra que el plantel se convierta en escuela de organización completa  y egrese ese año la primera generación.
En septiembre de 1955 son asignados al plantel el Profesor Evaristo Cruz Mendoza y su esposa la Profesora Ma. Santos Murillo Nájera, a su llegada ya estaban trabajando en el plantel las hermanas María e Isabel Castorena, por lo que a partir de entonces cada uno de los maestros puede ya  atender un solo grado, el Profesor Evaristo es encargado de dar  clases en cuarto grado y al mismo tiempo será el director del plantel. Durante su estancia que se prolongó durante 9 ciclos escolares que abarcaron de 1955 a 1964 desarrolló una formidable labor educativa que honró el mandato de los gobiernos de la revolución, de enaltecer la filosofía de la Escuela Rural mexicana. Construyó aulas, honró a Don Benito Juárez erigiendo un monumento en su memoria, una especie de pequeño Hemiciclo. Habilitó espacios con huertos de frutales, fomentó la explotación de puercos y conejos, puso a funcionar un estanque donde sembró diferentes especies de peces y de manera práctica hizo producir   la parcela escolar.
En 1958 logra que el plantel sea la única escuela federal que junto con la Primaria “Felipe Carrillo Puerto” funcione como escuela de organización completa, su primera generación de sexto grado egresa el 23 de junio de 1958.
El 19 de junio del presente año fui testigo de la clausura de cursos del ciclo del año lectivo 2018 – 2019 y del egreso de la  generación 62 de alumnos del plantel, se desarrolló un festival artístico sencillo pero de gran calidad y me llenó de orgullo la magnífica actuación  de una banda de guerra que fue gestionada por la directora del plantel Profesora  Consuelo Santoyo Puentes, ella conoce la brillante historia del plantel y ejerce hoy un verdadero liderazgo del equipo de maestros a su cargo, les inyecta  entusiasmo y dedicación  para hacer que el plantel sea -a mi juicio-  el mejor de la zona escolar a la que pertenece.
Son muchos los retos que le deparan a la institución, pero también es cierto que los actuales maestros deben ser continuadores del esfuerzo de quienes los antecedieron y que hicieron que el plantel tuviera un pasado de  renombre y prestigio.
Guillermo Orozco Rodríguez.- A 24 de junio de 2019.

sábado, 22 de junio de 2019

LÓPEZ OBRADOR Y LA EXPERIENCIA DE LA HISTORIA 

POR: GUILLERMO OROZCO R.


Los grandes lastres durante toda la existencia de México como nación independiente han sido la intolerancia, la ausencia de diálogo y la descalificación del diferente.
El esfuerzo por defender el derecho del mexicano ante las intromisiones extranjeras hace posible que la figura del Benemérito de las Américas se agigante,  antes de Juárez existía una idea de México, después de Juárez México se convirtió en  una realidad, en un  Estado con instituciones que —aunque incipientes— logró el constituir el desarrollo de una república. Otro factor que contribuyó a hacer de Juárez el gran factor de unidad en los mexicanos fue su resistencia cívica mediante la estrategia de una república itinerante  durante la Intervención Francesa. Más que de un gobierno nómada, se trató de un peregrinaje patriótico que fue uniendo las diversas regiones —muchas de las cuales entonces estaban dispersas socialmente-  despertando con ello la conciencia nacionalista popular.
En la época cardenista,  la política del general logró también despertar el sentimiento patrio  y la unidad nacional,  el Estado mexicano se situó en primer lugar al lado del interés popular, al lado los trabajadores,  ante el desagrado de la derecha y la burguesía nacional y extranjera. Su gobierno fue atacado  como un régimen que estaba en contra de las libertades  -es decir las de ellos y de sus intereses económicos-. Esos estratos consideraban que las medidas adoptadas por el gobierno eran perjudiciales para la burguesía, porque al vincularse con los trabajadores, el régimen tomaba partido favoreciendo con ello la lucha de clases y el fortalecimiento del proletariado, (la misma estrategia distractora de siempre, de que había peligro de llevar al país al  comunismo). -Qué bueno hubiera sido-.
El viernes 18 de marzo de 1938 por la noche, el presidente Lázaro Cárdenas declaró nacionalizada la industria del petróleo. México contrajo una deuda que sobrepasaba las posibilidades de pago del gobierno. Fue necesaria la contribución del pueblo. Sin dilación, toda la sociedad hizo caso del llamado. Las escenas de las donaciones fueron conmovedoras.
Los abusos de las compañías extranjeras petroleras en este país llegaron al punto de la indignación. La nacionalización se impuso como único remedio. La mañana del 23 de marzo de 1938 la ciudad de México se paralizó, Doscientos mil personas abarrotaron el zócalo para celebrar la expropiación petrolera.  Todos iban dispuestos a contribuir económicamente en la medida de sus posibilidades. Con ello se fortaleció el nacionalismo y se dio paso a la unidad nacional.
¿Y con esas experiencias, por qué López Obrador no? Ante la dura ofensiva del presidente de los Estados Unidos Donald Trump contra México, se han  despertado en México sentimientos nacionalistas ya olvidados y dormidos desde 1938.  Se ha propuesto,  desde el boicot a las empresas estadounidenses y un llamado a «consumir lo mexicano» hasta la colocación de símbolos patrios en los perfiles de usuarios de las redes sociales, el sentimiento patrio se refleja de distintas maneras. Esto ha tenido una aceptación considerable, salvo en los opositores al régimen, es decir el panismo y sus aliados que han quedado evidenciados como antipatriotas y traidores a México.
Cuando se trata de un asunto así todos debemos de apoyar, tenemos que hacer un frente de unidad, un frente para la unidad nacional. Un frente en el que participen los trabajadores, los empresarios mexicanos nacionalistas, los intelectuales, las amas de casa, los estudiantes, los profesionistas, los partidos políticos y todos los que estén convencidos de la defensa de los intereses nacionales.
La convocatoria del presidente López Obrador en  Tijuana, no logró la participación de la oposición, Acción Nacional y sus partidos afines brillaron por su ausencia, de nueva cuenta,  de no ser por el caso de Francisco Domínguez Servién, gobernador de Querétaro, a quien su calidad de presidente de la Conferencia Nacional de Gobernadores virtualmente le impedía no asistir. Los opositores orquestaron una activa campaña en redes sociales criticando el llamado de  López Obrador, los panistas prefirieron no hacerse presentes en el acto, al que calificaron de innecesario y ocioso, optando por privilegiar sus desacuerdos programáticos con el gobierno y no aportar a una muestra de fortaleza frente a una administración estadunidense que aprovecha cualquier indicio de debilidad para imponer su voluntad. No hubo congruencia partidaria, más bien un acto de oportunismo político orientado a encabezar a los resentidos contra AMLO de manera antisistema. Casi tan oportunista como su repentina preocupación por el control de la frontera sur y los derechos de los migrantes. Con una conducta de total incongruencia, pues semanas antes llamaron a apoyar al gobierno títere de Venezuela encabezado por Juan Guaidó. Ese comportamiento le seguirá restando popularidad y lo llevará a niveles de aceptación muy bajos  en el escenario electoral de nuestro país.
El multitudinario acto de unidad nacional llevado a cabo el sábado 8 de junio en Tijuana, Baja Californiaa instancias del presidente Andrés Manuel López Obrador, para celebrar el levantamiento de las medidas arancelarias que el gobierno de Donald Trump había amenazado con aplicar a México, tuvo lugar en un contexto de previsible alivio por haber sorteado, al menos de momento, la complicada coyuntura política generada por las presiones de Washington que usa como pretexto para agredir a México  el flujo migratorio que atraviesa nuestro país rumbo a Estados Unidos.
En tiempos de crisis ante el coloso del norte, no queda otra que el sentimiento nacionalista y la unidad de todos los mexicanos,  la experiencia de la historia así  lo demuestra. 
Guillermo Orozco Rodríguez.- A 17 de junio de 2019.

miércoles, 12 de junio de 2019

CASI 100 AÑOS….

POR: GUILLERMO OROZCO R.


  • Se fundó en el pueblo de Tacámbaro, Michoacán el 22 de mayo de 1922
  • * Fue resultado de una de las demandas de la Revolución mexicana en el rubro de educación
           Escuela Normal Rural “Vasco de Quiroga” en Tiripetío; Michoacán

Las Normales Rurales en México son inauguradas a partir de 1922; su misión: formar maestros destinados a zonas rurales donde, además de enseñar principios escolares y académicos en el aula, promovieran reformas en las prácticas higiénicas, de organización política, cívica y económica, capaces de homogeneizar cultural e idiosincráticamente a un país donde el 70% de su población vivía en zonas rurales y el 65% era analfabeta. Pronto se consolidó en el territorio mexicano la idea de esa escuela como casa del pueblo y al maestro como líder, guía y reformista. Escuelas diseñadas con un objetivo social: abrir sus puertas a sectores históricamente marginados, el campesino y el indígena.
La cuna del normalismo rural mexicano es Tacámbaro; Michoacán, la institución es resultado  de las demandas revolucionarias de llevar educación al pueblo. Aún se conserva el inmueble que albergó a la Escuela Normal Mixta Regional para Maestros Rurales, mismo que se ubica sobre la calle Benito Juárez, en el primer cuadro de la Ciudad de Tacámbaro.

En su fachada se han colocado cinco placas, una de ellas develada el 22 de mayo de 1972 en el marco del L  Aniversario de su fundación y dice:
EN ESTA CASA FUE FUNDADA EL 22 DE MAYO DE 1922 LA ESCUELA NORMAL MIXTA REGIONAL PARA MAESTROS RURALES, SIENDO MINISTRO DE EDUCACIÓN PÚBLICA EL LIC. JOSÉ VASCONCELOS. ESTE PLANTEL DE FUNCIÓN TAN ESPECÍFICA FUE EL PRIMERO EN MÉXICO Y EN AMÉRICA LATINA. LOS EXALUMNOS AGRADECIDOS A SU ALMA MATER EN EL 50 ANIVERSARIO DE SU FUNDACIÓN. TACÁMBARO, MICHOACÁN; MAYO 22 DE 1972.
Otra placa colocada diez años después cita:
LA SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA, EL GOBIERNO DEL ESTADO DE MICHOACÁN Y EL AYUNTAMIENTO DE TACÁMBARO, EN OCASIÓN DEL LX ANIVERSARIO DE LA FUNDACIÓN DE LA PRIMERA ESCUELA NORMAL RURAL DE MÉXICO, RINDE HOMENAJE A LOS MAESTROS Y ALUMNOS CON CUYO ESFUERZO SE HA REALIZADO LA EDUCACIÓN RURAL DEL PAÍS. ESTA ESCUELA POR LAS CUESTIONES POLÍTICAS QUE IMPERABAN DURANTE ESE TIEMPO,  TUVO QUE SER TRASLADADA A ERONGARÍCUARO, POSTERIORMENTE A HUETAMO Y FINALMENTE A TIRIPETÍO, DONDE ACTUALMENTE SE CONSERVA CON EL NOMBRE DE “VASCO DE QUIROGA”.
Las Escuelas Normales Regionales (al menos en el estado de Michoacán) estaban pensadas para que duraran muy poco tiempo en cada «región«, luego deberían de ser removidas a una nueva región con necesidades de maestros.
En abril de 1922 se le encomendó al profesor Leobardo Parra Marquina que  creara una escuela normal regional,  y así en menos de un mes el 22 de mayo de aquel 1922 surgió la Escuela Normal Regional Mixta. La primera en su tipo en México y en América Latina. Financiada  por el gobierno federal.
Por la situación tan difícil que en aquellos momentos se vivía en Tacámbaro por la guerra «cristera»  la Escuela Normal se trasladó a la población de Erongarícuaro, en la rivera del lago de Pátzcuaro. En el atrio y las instalaciones del convento de Erongarícuaro se estuvo trabajando desde 1928 hasta 1932. Luego fue trasladada a huetamo, (donde ya había existido una escuela normal regional, pero dependiente de la universidad). Ahí se le conoció como escuela regional campesina hasta 1940. Para 1941 se volvió a cambiar, ahora a la hacienda de la Encarnación, en Zitácuaro hasta 1949.
En 1949 llegó a la hacienda de Coapa en la comunidad de Tiripetío. Poco tiempo después de la desaparición de las escuelas  regionales campesinas, se transformaron nuevamente en escuelas normales rurales unisexuales y Zitácuaro era ya de señoritas, por lo que a su llegada a Tiripetío fue así: solo para mujeres.
Luego del movimiento estudiantil del 68, 14 de las 29 escuelas normales rurales fueron transformadas en escuelas secundarias técnicas, desde esa fecha Tiripetío empezó a albergar sólo varones, las jóvenes normalistas fueron trasladas a Cañada Honda; Aguascalientes  y las de secundaria a la Huerta (municipio de Morelia). 
Feliz aniversario escuela normal rural «Vasco de Quiroga" de Tiripetío; Michoacán.

¡ ¡ ¡ ¡ ¡ ¡ ¡Ya casi 100 años ! ! ! ! ! ! ! !

Guillermo Orozco Rodríguez.- A 10 de Junio de 2019.
Fuente.-  Investigaciones itinerantes. José Manuel Martínez Escobedo.




domingo, 2 de junio de 2019

DON RAFAEL RAMÍREZ CASTAÑEDA


POR: GUILLERMO OROZCO RODRÍGUEZ


* Nació en las Vigas, pequeño poblado cercano a Jalapa; Veracruz
* Gigante de la Educación Rural Mexicana
* Fallece hace 60 años en el Distrito Federal el 29 de mayo de 1959



Rafael Ramírez Castañeda es veracruzano de origen,  nació en las Vigas, pequeño poblado en las cercanías de Jalapa el 30 de diciembre de 1884. De origen campesino, sus padres Francisco Javier Ramírez y Pascuala Castañeda.

En 1906 obtuvo dos títulos en la Escuela Normal de Jalapa, de bien ganado prestigio en todo el país: el de Profesor de Educación Primaria Elemental y el de Profesor de Educación Primaria Superior. Ejerció en su estado natal, en  Durango, Guanajuato y en el Distrito Federal.
Pronto se ganó el respeto y la estimación de sus compañeros gracias a su saber científico, a su capacidad pedagógica, a su profundo sentido de responsabilidad, a su amor por los niños, a su honradez sin tacha, a su vida personal cargada de humana dignidad y a su notable afán por mejorar su capacidad profesional por la vía del estudio y del trabajo: no sólo era capaz de enseñar y de educar sino de aprender y  de educarse en el diario hacer con los niños, con  los padres, y con sus compañeros.
Es el estructurador de la Educación Rural Mexicana. Amaba profundamente al pueblo y de manera especial a los campesinos y a los indígenas. Creó  la  primera Misión Cultural de nuestro país en  el año de 1923, en la comunidad de Zacualtipán del estado de Hidalgo. Además fue el primer jefe que estos organismos tuvieron y actuó brillantemente  en los estados de Morelos y San Luis Potosí.
Legó a la Dirección general de las escuelas rurales federales, ya antes había participado en las tareas de su planeación y organización y desde allí, gracias a la experiencia adquirida en las misiones culturales, con la opinión de los expertos en educación rural  (los maestros de base), de los campesinos y de trabajadores de misiones, conjugó las aspiraciones educativas de la Revolución Mexicana.  Hizo posible que —como creación del pueblo— surgiera la Escuela Rural. Escuela que hizo de México un centro de atención para los educadores más destacados de nuestro Continente y de Europa. Lo breve de este trabajo no permite detalles, pero conviene expresar que para muchos filósofos de la educación la Escuela Rural nuestra fue no sólo una creación original sino fiel respuesta para los anhelos de justicia y libertad de nuestro pueblo. Alguna vez a John Dewey le plantearon problemas de educación rural mexicana y a quienes lo hicieron les dijo que no se explicaba por qué acudían a él,  cuando en México, tenían en Don Rafael Ramírez Castañeda uno de los mejores educadores del mundo.
La Dirección de Educación Popular, bajo la guía del muy distinguido educador Ángel J. Hermida Ruizpublicó, en su Biblioteca del Maestro Veracruzano, las obras completas de Don Rafael. De cada tomo se hizo un tiraje de 10,000 ejemplares, conteniendo las siguientes obras:
Tomo I:   La Enseñanza  de la Lectura, La Enseñanza de la Escritura, La Enseñanza de la Ortografía y  La Enseñanza del Cuento y la Dramatización. 377 páginas.
Tomo II: La Enseñanza de la Aritmética, La Enseñanza de la Geografía, La Enseñanza de la Historia,  y La Enseñanza del Civismo. 474 páginas.
Tomo III: Curso de Educación Rural, Técnica de la Enseñanza, y Curso breve de Psicología Educativa. 477 páginas.
Tomo IV: La Educación Industrial. 285 páginas.
Tomo V: Cómo dar a todo México un Idioma y 5 temas más sobre la formación de los maestros rurales. 205 páginas.
Tomo VI: Supervisión de la Educación Rural. 219 páginas.
Tomo VII: Organización y Administración de las Escuelas Rurales. 222 páginas.
Tomo VIII: Artículos y discursos. 254 páginas.
Tomo IX: Libros de Lectura. 236 páginas.
Tomo X: Libro “El Porvenir” (III y IV).  187 páginas.
Tomo XI: Libro “El Porvenir” (III y VI).  214 páginas.
En total 3,120 páginas y 11 ejemplares. Pero el número de obras y páginas no es lo importante: Lo que cuenta es que Don Rafael en sus libros de Técnica de la Enseñanza se dirigió al Maestro Rural con un lenguaje claro y sencillo pero de estricto rigor científico. Con una cualidad propia  de los que saben y quieren dar su saber, pero que también quieren aprender, enseñaba y explicaba a los demás sin la  pedantería propia de los tecnócratas, o dioses del olimpo pedagógico.
Afirmaba que era obligación de los funcionarios públicos ligados al ramo educativo que si amaban con sinceridad a las clases populares y deseaban hacer algo  por ellas en pro de su mejoramiento moral, social y económico;  ver en la escuela  el medio más eficaz de redimir al Pueblo; a todos los maestros, en suma, que trabajen para bien del proletariado, mediante su influencia educadora, abnegadamente, honradamente, con toda su voluntad, con todo su pensamiento y todo su corazón, sin egoísmos ruines, sin ambiciones mezquinas,  sin fines bastardos, sin hacer de su profesión un recurso de medro censurable ni de su cátedra de apostolado un puesto de mercader.
Don Rafael Ramírez afirmaba categórico: “El proletariado en sus largas y perpetuas luchas de rehabilitación ha venido alcanzando una que otra conquista en algunas partes. Entre ellas se cuenta el acceso a la escuela…escuela concebida y organizada con el sentido, la tendencia y la ideología.  El acceso a ella de la niñez y de la juventud es un derecho”.  “México… no tiene una estructura social homogénea. Su población está compuesta de dos capas sociales: burguesa y proletaria. De cada 100 personas… apenas 15 nadan en la abundancia, teniendo a su alcance riqueza de toda especie, las 85 restantes viven en pobreza extrema y carecen de las cosas más indispensables como el pan y el abrigo”. Sólo con la educación se pueden evitar esas diferencias.
Estos conceptos eran lo que sus enemigos —entre los que se cuentan “revolucionarios” y “reformadores”— no le perdonaban  porque, Don Rafael, abogó siempre por una escuela del pueblo y para el pueblo. Tampoco le perdonaban  que acudiera a reuniones donde se discutían problemas sociales y se abogaba por la paz y —menos aún— que firmara manifiestos al lado hombres como Bassols, Siqueiros, Diego Rivera y otras notables personas de la izquierda mexicana. Era un hombre verdaderamente peligroso para ellos: despreciaba el dinero y no había manera de hacerlo callar. Murió el 29 de mayo de 1959 envuelto en el manto sagrado de  la pobreza pero enarbolando  la más limpia de las banderas: la de la dignidad humana. Sus restos reposan en la rotonda de las personas ilustres de México.
Recordar y rendir homenaje al hombre que mejor representa ese gigantesco y admirable movimiento conocido como educación rural mexicana es un acto de elemental justicia.
El continuador de su filosofía, conducta y obra pedagógica lo fue indudablemente el Profesor José Santos Valdés, a quien merecidamente se le denomina  “padre del normalismo rural”. Es por eso que sus exalumnos y miles de maestros normalistas de todo el  país se han echado a cuestas la tarea de que al igual que don Rafael sus restos reposen en la misma rotonda. Estoy seguro que lo  lograrán.

Fuente.- Profesor José Santos Valdés.- Tomo IV de las Obras completas, editadas por la Escuela Normal Experimental de Nieves, Zacatecas en  2005.

Guillermo Orozco Rodríguez.- A 3 de Junio de 2019.