Cañada
Honda un intento más de agresión
al
sistema de Educación Normal
Guillermo
Orozco R.
“Lucho por
una educación que nos enseñe a pensar y no por una
educación que nos enseñe a obedecer”. Paulo Freire
El proyecto de cobertura educativa de
educación normal inicia el 22 mayo de 1922 con la fundación de la primera escuela normal rural, esto
es en Tacámbaro, Michoacán, (actualmente funciona en Tiripetío) con una matrícula de 7 mujeres y
18 varones; de ahí con altibajos se fueron formando escuelas para hijos de
campesinos a lo largo de todo el territorio nacional.
La
Escuela Normal de Cañada Honda,
Aguascalientes es producto de ese esfuerzo revolucionario de llevar
educación a los hijos de los campesinos de México. Se localiza al nororiente
de Aguascalientes, a tan solo 22
kilómetros, por la carretera que va a Loreto; Zacatecas, en la comunidad ejidal José María Morelos, en sus inmediaciones se sitúa el casco de la
ex hacienda de Cañada Honda, que es donde funciona el prestigiado plantel
femenil.
La hacienda se
forma durante el siglo XIX, tenía una
extensión de casi 6 mil hectáreas, era
un centro de población de más de 500 habitantes. Durante el cardenismo, la hacienda se vio alcanzada por la reforma
agraria, y desde 1939 la casa grande fue convertida en Escuela Normal Rural
para mujeres.
Los orígenes del plantel se remontan a Tapachula, Chiapas, donde funcionó en 1937 la Escuela Regional campesina del Soconusco. El 11 de marzo de 1938 se incendia la Escuela,
circunstancia que aprovecha el diputado J. Isabel Durón, oriundo de Cañada Honda, quien solicitó con éxito,
que la escuela fuera trasladada al estado de Aguascalientes. El director de esa
etapa de transición de Chiapas a Aguascalientes fue el Profesor Álvaro Narváez.
Inicia su funcionamiento en esta entidad en
febrero de 1939 como escuela elemental
agrícola, adquiriendo su nivel de escuela regional campesina ciclo que termina el 1º de febrero de 1941. Finalmente se le da
el reconocimiento de Escuela Normal Rural.
En un principio atendía a estudiantes de
ambos sexos hasta que en el año de 1943 los varones fueron trasladados a la Normal
de San Marcos Zacatecas,
quedando a partir de esa fecha y hasta
el día de hoy como escuela exclusiva
para mujeres con servicio de internado.
A partir de 1948 con motivo del
centenario del natalicio del gran educador mexicano Justo Sierra Méndez se le
pone este nombre. Asisten a la misma 358
alumnas en su mayoría son hijas de campesinos con pocos recursos.
Provienen de municipios de Aguascalientes, Durango, Zacatecas, San Luis Potosí,
Guanajuato, Jalisco y Guerrero. Tienen grandes carencias materiales y varias de
ellas sufren de anemia.
Se les destinan anualmente 6 millones 700 mil
pesos, es decir 51 pesos al día para cada una de ellas. Una
cantidad que a los mercenarios merolicos de la prensa local y a algunos funcionarios les
parece exorbitante.
El internado, lugar donde viven las
estudiantes, está en franco deterioro, las instalaciones son precarias y
carecen de mantenimiento adecuado. Faltan docentes, materiales educativos y servicios médicos. Después de
su funcionamiento a lo largo de 76 años en que se estableció en ese lugar, los
dormitorios siguen siendo los mismos, apenas se repara un área cuando ya otra
está requiriendo urgentemente mantenimiento.
Desde finales de mayo hasta el 9 de junio de
2017 la normal vivió la peor y más compleja crisis de su historia. El 31
de mayo el IEA (Instituto Estatal de Aguascalientes) con la anuencia del
reaccionario gobernador panista Martín Orozco Sandoval, publicó en su página de
internet la convocatoria para nuevo ingreso
para el ciclo 2017-2018.
La convocatoria desató una gran inconformidad de las
estudiantes, en especial por dos puntos: la escuela para mujeres se
transformaría en mixta y la matrícula sería reducida de 120 a solo 100 nuevos
aspirantes. Ante ese anuncio las
normalistas iniciaron marchas, plantones,
bloqueos de vialidades y retención de vehículos de varias empresas
distribuidoras de alimentos.
El viernes 2 de junio las alumnas, apoyadas por estudiantes normalistas de
otras entidades, bloquearon los accesos del IEA, y no permitieron el ingreso a
los 450 empleados. Además,
alrededor de 500 estudiantes se manifestaron frente al Centro Comercial
Altaria, ubicado sobre la carretera federal 45 norte, luego avanzaron por la
zona centro con destino a la Plaza de la Patria y efectuaron un plantón frente
a palacio de gobierno.
El 4 de junio las normalistas de Cañada Honda
citaron a rueda de prensa para advertir que no eran negociables ninguno de los
dos puntos que impugnan: la reducción de la matrícula y la conversión a escuela
mixta.
El IEA anunció que se reuniría con una comitiva de
seis de las normalistas a las 17 horas del 5 de junio en la sede de la Unidad
Regional de Servicios Educativos para
buscar instalar una mesa de diálogo conformada por autoridades estatales,
federales y las estudiantes, las
estudiantes bautizaron la iniciativa como mesa de monólogo.
El 6 de junio en rueda prensa, el titular del IEA,
Raúl Silva Pérez-Chica, informó que se
daba marcha atrás a la propuesta de reducir de 120 a 100 la matrícula, pero aclaró que no era negociable el tema de
hacerla mixta y que se podría comenzar con 20 espacios para hombres y 100
para mujeres.
El viernes 9 de junio cerca de 30 normalistas
provenientes de la normal de Tiripetío,
Michoacán, fueron objeto de represión por parte de la policía municipal de
Aguascalientes, mismos que
tuvieron que ser internados por lesiones graves ya que también
fueron golpeados de forma brutal por personas que los agredieron con
furia cuando los estudiantes intentaban esconderse de la policía en algunas
casas de las colonias Constitución y Soberana Convención. Policías y vecinos
golpearon brutalmente a los estudiantes; 16 de ellos fueron atendidos en el
Hospital de la Fundación Médica México Franco Brasileña, diez de ellos están en
estado grave, uno podría perder un ojo.
Gracias a la solidaridad y a la unión de las
Escuelas Normales, al apoyo del pueblo de José María Morelos donde se ubica la
normal, a ex alumnas del plantel y a
gran parte de la sociedad, se resolvió
la situación de Cañada Honda, después de una violencia innecesaria se firma un
acuerdo entre las alumnas de la Escuela
Normal Rural y Raúl Silva Pérez-chica,
titular del Instituto de Educación de Aguascalientes (IEA).
En el acuerdo se incluyen tres puntos, no
realizarán más las “novatadas”, (punto que nada tenía que ver con el problema),
se mantendrá el número de becas para la matrícula de ingreso de 120 alumnas y
este plantel seguirá siendo exclusivo para mujeres.
Los acontecimientos suscitados en la Normal
de Cañada Honda, no se encuentran aislados
de la reciente crisis y amenaza contra todo el sistema de educación
normal. Gobernadores, autoridades educativas de todos los
niveles y la complicidad de dirigentes del Sindicato Nacional de Trabajadores
de la Educación se han propuesto acabar con el sistema de educación normal.
Las 260 Escuelas Normales que existen en el
país están siendo objeto de serias amenazas y severos cuestionamientos, se argumenta que no están cumpliendo con el perfil de excelencia
que requieren los futuros mentores para poder impartir una educación de
calidad. Sin embargo, gran parte de la responsabilidad sobre esta
situación recae en el Estado y las autoridades educativas.
Al gobierno neoliberal no les bastó el crimen de los estudiantes de
Ayotzinapa, estuvieron a punto de repetirlo con Cañada Honda.
¡CAÑADA
VIVE!
¡LA LUCHA SIGUE!
Fuente.- Ortiz Briano Sergio. Entre la
nostalgia y la incertidumbre.
Guillermo Orozco Rodríguez. 19 de Junio de
2017.
No hay comentarios:
Publicar un comentario